miércoles, 26 de septiembre de 2012


- A ti hombre, ese bello animal de la naturaleza, del que Dios ha dotado de tantas proezas, a ti, que 
me encuentro presa de las redes de tu cuerpo porque encuentro en ti una sensualidad tan perversa
que me hace perder la cabeza hasta en el sueño, no me conviertas en rostro del pasado, porque 
quiero ser la ilusión de tu futuro. Es un placer enigmático mirar cómo se manifiesta en ti el instinto 
animal que llevas dentro. Me conmueven tus besos hasta la médula, mi pasión se desata con sólo
rozar tu piel y mi corazón se inquieta nada más mirarte.
Gozar a cada momento de ti.....es descubrir un universo rendido a mis pies, y tu mirada es la corona 
que cubre mi cabeza, tu beso....es el aliento que mantiene mi vida. Si quieres existir...sólo tienes 
que respirarme, desearme... ., porque quiero..... .que te abrases con mi fuego, que te hierba la sangre, que te quemes la piel cuando me toques, que te tiemble el pulso cuando me rodees con tus
brazos, y que no me sueltes nunca.
Desearía que nos cegara la pasión desenfrena a que llevamos dentro y que nuestra furia se con-
vierta en locura de amor salvajemente aprovechada, que la punta de tu lengua investigara mi cuer-
po, todo entero, con una intensidad masculina, placentera y morbosa a la vez. Siéntete dueño de
mi amor y yo del tuyo, sostén mi corazón en llamas y déjame sentir tu virilidad en erección dentro 
de mi y saber que eres mio.
Quiero jugar con todas tus íntimas fantasías eróticas y hacer realidad tus sueños y ánsias más pro-
fundas. Mi sentimiento de placer es de tan gran magnitud que no dejo de buscarte intensament e en 
mis sueños. Quiero enloquecer contigo sin límites, quiero.... que tus dedos.... se deslicen en mi cuer-
po jadeante dispuesto sólo para ti, y que perdamos el nivel de la decencia. Déjame amor, perder el 
control, endurecer tu anatomía hasta que te duelan los miembros y llegar al máximo climax de éxta-
sis hasta desmayar entre tus brazos y enloquecer. 
Pensar en ti solamente es........h umedecerme lentamente, placenteramente. 
Miremos los dos en una sola dirección, hagamos que el universo sea nuestro teniendo a la luna co-
mo único testigo, que tus pupilas se derritan con las mias , que tu cama sea la mía, que tu almoha-
da juegue con tus sueños y los mios, y que un único colchón de cobijo a nuestros más íntimos con-
tactos carnales, lascivos, que tu carne y mi carne sientan la desnudez de un sólo cuerpo, que sea-
mos almas gemelas al unísono en el silencio de la noche y el despertar de la mañana. A tí hombre,
quiero que me hagas el amor mientras la nocturnidad nos envuelve con su áurea y que sientas lo 
que yo siento. Quiero abrir en tu vida un libro con las páginas en blanco para que puedas desnudar
tu alma al libre albedrío y nunca dejes de sentir la llama de la esperanza. A ti hombre, bello animal
cierra los ojos y siente mi dulce beso sobre lo más íntimo de tu piel, porque quiero amarte y que 
sientas lo que nunca has sentido, y porque quiero mirarte lentamente y poner los cinco sentidos en 
poseerte suavemente mientras te derrites suavemente sobre mi cuerpo. Nada nos prohibe la vida. 
Vivamosla ...... intensament e....amor

SUEÑOS



Tú con que sueñas? 

Yo?

Sueño, con recorrer el mundo con una mochila a la espalda…
Sueño, con el día de mi boda
Sueño vivir junto a él, lo que me queda de vida
Sueño, con que las cosas siempre vayan a a si de bien
Sueño, con tener a  mi familia siempre a mi lado
Sueño, con aprender  todo lo que la vida me enseña
Sueño, con escribir un libro y que alguien lo lea
Sueño, con escalar una montaña bien alta
Y sobre todo sueño, con que todos mis sueños se hagan realidad

Y tu, con que sueñas ¿?

miércoles, 19 de septiembre de 2012

Carta a mi cuerpo


Cuerpo mío:

Me he comido las uñas de la mano izquierda. La levanto y me doy cuenta de que duelen los dedos, me miro al espejo y te invito a hacer ejercicio pero no encuentro respuesta. Eres necio, traicionero, vulnerable y vagabundo y como serás mi compañero hasta que la muerte nos separe hoy debo escribirte para sellar lo nuestro.


Te hablo yo, la que vive dentro de ti, agradecida, emocionada y resignada a tenerte. La verdad es que supe que algo andaba mal entre nosotros cuando una y otra vez enfrentaba esos dolores insoportables!!, pero entonces no sabía que nunca podría cambiarte. Te recuerdo la vergüenza que me hiciste pasar en la playa fue a la fuerza que entendí que solo te gustaba el traje de baño entero.


Te reprocho los pelos en las piernas,la acidez constante, los dolores de estómago, los dolores de cabeza, las palpitaciones y el suplicio de la regla mes a mes. Ni hablar de las alergias y los ataques de asma que por tu culpa tuve que atravesar en mi niñez.


He luchado por hacerte diferente pero tú no lo has permitido, por eso admiro tu firmeza y determinación. En realidad te odio y te quiero porque has sido bueno y malo a la vez. Nadie como yo sabe que hambriento eres capaz de cualquier cosa, doblegas mi voluntad para comerte lo primero que encuentras y luego te desparramas sin importarte que yo cargue con la culpa y tú con los kilos demás.


Te agradezco el rostro, el cabello hermoso y por el vientre plano que tuve alguna vez, por hacerme lucir el vestido negro más bonito de aquella noche que sólo tú y yo recordaremos, por aceptarme como soy, por  llevar nueve meses a mis hijos y ayudarme a dar a luz. Te ofrezco mis disculpas por lo de la apendicitis, por lo de las fracturas, en fin por tantas marcas solo culpa mia!! 


En otros asuntos no tengo queja alguna de tu actuación. Siempre te acoplas a los vaivenes del deseo porque lo tuyo es pasión, dejando para mí el rollo de los sentimientos y la razón. Hemos vivido momentos increíbles, queridos o no, sentidos o no y tú siempre has estado allí para mí.


Envejeces con orgullo mientras yo me regodeo en la experiencia y la reflexión. Veo como el paso de los años te deteriora y a mi me fortalece. Es un placer habitarte y como sé que algún día no muy lejano tendré que abandonarte, tendido en una cama o como quiera que lo de morirnos tenga que acontecer, sabrás que siempre has sido “mi” cuerpo, solo mío y de nadie más.


Con todo mi amor,


Yo

otra mas de mis despedidas



Querido Tú:

He decidido escribirte mi última carta.

Sí, es una carta de despedida. Una despedida formal, que es el resultado de la suma de pequeñas despedidas diarias que se han ido sucediendo en los últimos días. Al fin y al cabo se trataba de eso: de que estabas saliendo de mi vida y yo, tan ingenua, ni siquiera era capaz de entender las pistas que me estabas dejando. Sé que dirás que vuelvo a exagerar, que tengo necesidad de atención continua y que ambos somos adultos sensatos y responsables que conocíamos de antemano las reglas del juego…Otra vez estoy en tu terreno ¿lo ves? Tú actuando como si no ocurriese nada y yo, comportándome como una neurótica, poniéndole nombre a este nuevo fracaso…

No quería darme cuenta de que esta era tu forma de decirme “adiós, ya no te importa tanto como antes…”. No notaba que las últimas tres veces que hemos andado has puesto una excusa improvisada de última hora para evitarme. Si ya sabes que soy muy simple, muy lineal…sabes que no tengo ángulos, sólo aristas en el único poliedro de una sola dimensión que conoces…¿Por qué no me lo has dicho mirándome a los ojos? Al menos evitaría la tortura de pensar que aún queda la posibilidad de estar equivocada…Pero es que las señales son tan claras…Antes, no es que ocupase el centro de tu vida Amor, pero ahora siento como si me hubieses relegado a estar en un rincón de tu alma. Me has dado una planta para que la sujete y ahí estoy inmóvil desde hace al menos dos meses…de mujer-florero.

¿Qué ha pasado?¿Me ves distinta?¿He sido yo quien ha cambiado?

No quiero que me contestes. En realidad sé las respuestas, aunque ya no me sirvan para vendarme los ojos.

No quiero pensar en que esto se ha acabado y en lo tristes que son las despedidas, sino en el tiempo que hemos pasado juntos -sin rencores- y en las sensaciones que he vivido contigo. Con eso me quedo. Las despedidas son siempre inevitables y agrias, pero el recuerdo que sobreviva al olvido cuando el dolor desaparezca, me susurrará siempre que lo nuestro mereció la pena…

pre....pro...pos...

"Breve" historia de la amiga que por un día tratar de ser ella, perdió a una persona que de "Buena" pasó a ser extraña: Antes: Lo que no se hablaba, lo murmuraban las sonrisas, lo que no había se sustituía...lo que era ser feliz, se quedaba corto.. La envidia se usaba al rededor de éstos, era CADA DÍA... algo especial... y una amnesia de todo lo que tuvieran que hacer siempre que no se tratara de ellos ... eran ELLOS... eran UNO..!!! Eran de esas Cosas Que Van Juntas eran de esas tantas películas sin comerciales, sin tiempo de por medio, podría decirse que ERA un amor natural. Igualaban la sensación de soñar que se duerme sobre una nube y se es protegido por la luz de la luna. Significaban todo entre sí : desde los que se ven desde el corazón hasta... los que aunque solo sepan pelear, no pueden estar separados. Es verdad, ellos... no tenían muchas cosas en común, él era arisco, orgulloso, amante del rock...ella mientras tanto, malcriada y consentida amante de la musiquita suave... Aquello era como tener en las manos de un lado un candado... y del otro esas llaves que todos podrían tener... Peeeeeeeeero... aún así !!! Esto era ÚNICO! únicamente especial únicamente intenso, necesario, masoquista........ ÚNICAMENTE PERFECTO!!! Yo no es que me sienta muy identificada con la amiga la verdad, porque imagínense!! malcriada consentida, dominante, que va!! eso sí..! de un déééééébil por más paradójico que suene que sinceramente, "estar en sus zapatos" debe sentirse como calzar 40 y tener unos 35.

Pero Bueno.. esta sé que, es una de esas HISTORIAS BREVES donde sale uno que otro y dice: Eeeese personaje puedo ser yo!, o algún día lo fui o simplemente... "temo al día en que llegue a serlo". En este orden de ideas; siempre he pensado que en la rutina hay algo que no se debería alterar, y dentro de ello: aparte de mencionarles las 3 comidas inquebrantables del día, puedo nombrar 3 elementos mas: La Mesa, La Silla y la buena intención para cocinarle a los tuyos...


Fíjense. La comparación es simple. Dar esa o cualquier otra sería muy útil para entender que cuando se ama DE VERDAD, no vale la pena creer en "CUARTOS" elementos.

Pero , continuemos... TRES elementos más (que son igual de importantes y siguiendo la tónica de las comparaciones) pueden ser: el lápiz, el cuaderno y ese alumno que se enamora del afán de su maestra por enseñarle. De esto se conforma esta Historia cortica amigo (a) ... de 3 ELEMENTOS que dan vida a mi Musa... De 1 persona......De Otra...... Y DE MIS SENTIMIENTOS...

En el DURANTE: varios elementos extras se hicieron notar, ( yo los llamo "AQUELLOS" saben no? los 3eros...) ; queriendo demostrarle a la parejita que....bueno que... aún siendo dos factores en conjunto, amándose y luchando por creer en algo resultaría imposible porque no valdría la pena nada... En el durante de este par, lo que se iba presentando a pesar de quebrantarlos un poco, no había NADA!!! que un beso o una buena comunicación no tachara y dejará atrás el resto. Era una fuerza a prueba de balas que se desarrollaba con solo mirarse cálido y preciso: donde los te amos era pan de cada día, y la ausencia de dolor...se hacía presente. Era un durante de planear, un durante de compartir, de reirle a los malos momentos, de curarse con una caricia y de quitarse hasta el aliento hasta en el último gemido haciendo el amor, cosa que realmente llevaban tiempo haciendo y que en el ejercicio como tal solo era: jugar entre pieles y hacer especial el rato con energías sinceras.


No había cuartos elementos hasta que llegó el DESPUÉS. Les continuara la historia... pero el CUARTO ELEMENTO no me lo permite ya... Sólo díganle a mi amiga si la ven ... que siga esperando... que si es de ella.... siempre lo fue y será algo mejor en un Mañana... de lo contrario!!! que no cambie su Presente por un pasado que no tiene futuro...

lunes, 17 de septiembre de 2012

nueva oportunidad


Cuando sobreviene un gran disgusto, nos parece que todo está perdido. Sin embargo, la vida suele darnos lo que habitualmente se llama una segunda oportunidad. Además, es bueno saber que, en realidad, las oportunidades son muchas más que dos…
En la vida de toda persona se produce una gran debacle en algún momento. Al oír el diagnóstico de una enfermedad difícil, luego de una gran desilusión sentimental, la muerte de alguien cercano, a causa de una iniciativa comercial frustrada o alguna situación de este tenor, la primera percepción suele ser que ahí se termina todo. El fin del mundo acaba de anunciarse para nosotros. Vemos imposible volver a levantar cabeza, nos parece estar en un callejón sin salida, con acceso vedado a la felicidad.
La primera etapa por lo general es la negación: a mí no me puede estar pasando esto, hay una equivocación, el teléfono va a sonar y ese llamado va a terminar con la angustia que siento. La negación es una respuesta instintiva a la desesperanza. Nuestro mecanismo de supervivencia lucha contra la agresión provocada por noticias angustiantes, tratamos con todo nuestro empeño que no sea verdad lo que está aconteciendo.
Suele manifestarse cierta depresión, ya que en un principio no se vislumbra la salida, y si se llegara a tener idea de cómo dejar atrás la debacle, la solución muchas veces suele no ser instantánea y requerir un gran esfuerzo. Algunas personas fluctúan entre períodos de depresión y otros de exaltación en los que tratan de llevarse el mundo por delante y creen que así la situación cambiará mágicamente.
En este punto cabe señalar que no hay actitudes buenas o malas, en los momentos de crisis reaccionamos como podemos y es positivo permitirnos que así sea.
Lo que produjo la debacle fue un proceso, el salir de ella, también lo será. Es bien posible hacer el intento ¡y tener éxito!. “Nada es permanente, todo se transforma”, reza una ley física. Vale la pena vivir y apostar al futuro, donde nos esperan un sinnúmero de posibilidades variadas en todos los campos. Una excelente manera de descubrir nuevamente la claridad es con compañía, o sea, hay que tener en cuenta que pedir ayuda a quien creamos conveniente es clave es este momento.
Para transitar el proceso de salida de esta situación tan dura, primero es necesario aceptarla. La aceptación implica entender cabalmente que, en efecto, esto tan temido o completamente inesperado tuvo lugar, y nos está sucediendo a nosotros. Aunque no lo merezcamos, no queramos o no sepamos qué hacer, sí, nos está pasando. En la medida que podamos, a nuestro tiempo, describamos la situación en primera persona. Una vez que nos acostumbremos a esta nueva realidad, el dolor irá quedando atrás.
Aceptación implica también perdonarnos incondicionalmente. Por los alertas que no quisimos o no pudimos ver. Por la negligencia o la extrema inocencia con la que actuamos. Por haber confiado a ciegas en nosotros mismos o en otra persona. Por no haber escuchado lo que nos decían, o por haber callado nuestras propias voces internas.
La aceptación es el puente que nos lleva del dolor a la paz interior. Nos conecta con nuestra condición de seres humanos, falibles, con errores y defectos, al igual que todas las personas que nos rodean. Asumir los errores como propios nos aporta claridad de conciencia. El autoconocimiento es esencial en la búsqueda del equilibrio psicofísico.
El aceptar el momento presente abre las puertas hacia otra oportunidad en la vida. Al entender exactamente qué sucede operamos en la realidad, y así contamos con la mejor predisposición interior para ver el abanico de posibilidades que se abre delante nuestro. De este modo lograremos las modificaciones de rumbo que deseamos. Todos tenemos la capacidad de procurarnos un futuro mejor. Cada día puede significar una nueva oportunidad, y trasformarse en un nuevo comienzo y en el primer paso hacia un futuro promisorio, si así lo decidimos

domingo, 16 de septiembre de 2012

Un beso, antes de ponerme la coraza…



Como suele suceder… a veces las cosas no marchan como uno quisiera… y en esta oportunidad, definitivamente, las cosas no sucedieron como yo tanto lo anhelaba.
Este año ha sido un año bien raro… lleno de bajas y muy pocas altas que valga la pena recordar. Ha sido un año… lleno de cosas inesperadas. De afectos que llegaron y se fueron, de afectos no devueltos… y de afectos no aceptados. Por todo lo demás… sin novedades al frente…
Creo pues, que llegó el momento de ponerme definitivamente la coraza, la armadura, la costra, el chaleco antiafectos… y hacer duro a mi corazón otra vez.
En algún punto de estos días que han transcurrido del 2012, decidí quitarme la armadura que protegía mi corazón, darme la oportunidad de querer y que me quisieran (si es que eso es posible…) y vivir cada momento como si fuese el último… claro, en mis cálculos, no estaba contemplado que en las veces que me arriesgué, terminara con “serious injury” en mi corazón. No es victimizarme… simplemente, por tonta que fui (y eso lo reconozco) me dejé lastimar…
Hoy, 16 de septiembre de 2012, vuelvo a tomar mi armadura… esa coraza impermeable, y se la pongo a mi corazón. De pronto me siento sin fuerzas y sin ánimos de seguir caminando con un corazón vulnerable… y es que ya no quiero entregar mi corazón, al menos, no durante un buen tiempo.
Amar es la sensación más maravillosa que pude haber vivido… pero de pronto me pongo a pensar, si teniendo tanto amor para dar, sabiendo entregar cada uno de mis días, ver todo desde otro punto de vista (y es que el amor hasta te cambia la visión…) y vivir feliz cada día, nadie quiera recibir este afecto y cuidarlo como lo que más… es que quizá, simplemente, ese alguien no está listo para recibirlo. Lo doloroso es, retirarse con dignidad, con la frente en alto, sabiendo que se hizo y se entregó todo con sinceridad y recoger, pieza por pieza, los trocitos de corazón roto que se regaron por acá y por allá.
Como dice mi amiga kate, creo que no necesito más teipe para reparar mi corazón… necesito cemento de contacto…
Guardo cada momento vivido, como la joya más valiosa que tengo. Tengo pues, en mi joyero de afectos, un hermoso collar de diamantes… tan brillante y cálido como el mismo sol. Me hace feliz verlo, porque cada uno de esos pequeños diamantitos, son un momento feliz… así pues, puedo decirme a mi misma, a manera de consuelo, que todo lo que pasa en mi vida debe hacerme feliz, debe dejarme una lección. Que sí así como cuando amaba los días eran más brillantes y llenos de luz, ahora que me encuentro así, deben brillar aún más, porque me queda todo ese amor dentro, añejándose y preparándose para alguna persona que vaya decidir venir, quitar de a poco la coraza y recibir todo lo que se va guardando.
Anoche me puse a pensar, antes de dormirme… cuánto más habrá que esperar por alguien… y me contesté a mi misma, que no importaba cuánto tiempo pasara… porque cuando el momento llegara, sería EL MOMENTO. Un pensamiento bastante, bastante simple… pero que me hace pensar que después de todo, sí lo quise sensatamente… no fue una locura quererlo, puesto que sigo teniendo esos flashazos de lucidez y cordura. Al menos eso me da tranquilidad…
La coraza me queda muy bien… seguro mantendrá protegido mi corazón durante un buen tiempo…

Y como dice Alux Nahual… “DARÍA TODA MI VIDA SI TE OFENDÍ… PORQUE PERDONES A TU AMIGA QUE SE ENAMORÓ DE TI…”.
En serio fue inevitable… lo siento muchísimo…